sábado, 19 de mayo de 2007

ALFREDO, EL REY SOL



Por fin lo he descubierto. La pasión arboricida del candidato Monteseirín se debe al aprovechamiento con el que cursó la secundaria. Él estudió que los franceses, a su monarca más absoluto lo llamaron el Rey Sol. Quizás la lección no llegó más allá, o quizás lo entendió mal. Es caso es que ahora que llega de verdad la calor Sevilla se ha vuelto, sin árboles, un desierto. El otro día, de campaña, Alfredo quiso bajrse a la playa. Y adónde fue? Nada de Chipiona o Matalascañas...Alfredo bajó a su Alameda. La alameda, sin árboles, amarilla, sin un banco, un seto o una mala sombra es una playa desoladora. Y por allí lució palmito poniéndose moreno.

Ahora ya sé por qué la avenida está desplobada. No hay sitio para la sombra en el reino de Alfredo, el Rey sol. Y los sevillanos, tostados como kikos.